Pasear por el Parque es una experiencia para los sentidos. Patrimonio cultural y paisaje se dan la mano y permiten experimentar la magia escondida en algunos de los más bellos y significativos petroglifos de Galicia en el contexto ambiental que le da sentido.
Un itinerario de más de 3 kilómetros de longitud, salpicado por áreas de descanso y fuentes, atraviesa un extraordinario paisaje cultural caracterizado por la alta densidad de petroglifos, en la que es posible contemplar los principales motivos y escenas que se plasmaron en los grabados rupestres gallegos.